... Recuerdo haber tenido compañeros con polio que habían quedado paralíticos.
"La vacunación es la medida de prevención con mejores resultados y menos coste económico"
DONOSTIA. "El sarampión y las paperas son enfermedades víricas y por lo tanto son contagiosas, pero tenemos un antídoto excelente como es la triple vírica que ponemos a nuestros niños y niñas. La vacuna es la intervención sanitaria que, con menos coste económico, produce mayores beneficios", explica el especialista Pedro Gorrotxategi.
En el último mes se han disparado las alarmas al detectar brotes de sarampión y paperas en jóvenes-adultos. ¿Son los habituales de cada año? ¿O son casos raros?
La vacuna del sarampión tiene una protección casi completa, por eso es difícil que aparezcan casos. Sin embargo, las paperas, aunque no son habituales sí las solemos ver en jóvenes y adultos. Y es que la vacuna frente a la parotiditis no protege al cien por cien. Ello nos lleva a que personas adultas puedan estar inmunizadas, pero solo de forma parcial por lo que puede contagiarse del virus. Además hay que tener en cuenta que muchos de los adultos mayores de 50 años no están vacunados ni de paperas ni de sarampión. Antes, las vacunas no estaban generalizadas; se ponía la rubéola a las niñas. Luego se cambió por la triple víricas: rubéola, sarampión y paperas. La inmunización comenzaba a los once años en niños y niñas; posteriormente se extendió la triple vírica a toda la población infantil. Por último se decidió adelantar la vacuna porque había algunas epidemias, por ejemplo, del sarampión, que podían dar muchas complicaciones. El último brote de sarampión ha sido excepcional.
La triple vírica está incluida en el calendario vacunal de Euskadi. ¿A qué edad se pone? ¿Es efectiva?
La primera dosis de la triple vírica se inicia a los 12 meses y la segunda a los cuatro años. Se puede inmunizar a los bebés antes, pero después hay que repetir al año la vacuna porque la protección es menor.
¿Es para toda la vida?
Sí. Además, no hay que volver a repetirla. La vacunación es la medida de prevención con mejores resultados en la población general.
¿Incluso si se está protegido, pueden aparecer casos de paperas en jóvenes y adultos?
Sí. Porque la protección que se da frente a este virus es algo menor. Puede ser que no hayan desarrollado defensas adecuadamente; el problema radica en las personas que no se vacunan y se quedan sin protección. Cuando se produce algún caso es este colectivo el que lo propaga enseguida entre el resto.
¿Es lo que ha ocurrido recientemente con el brote de sarampión detectado en Gipuzkoa?
Sí. El brote epidémico del territorio de Gipuzkoa provenía de un chaval no vacunado que estudiaba en Hendaia y vivía en Irun. Nueve de los 21 contagios tenían este mismo origen. Según el Comité Asesor de Vacunaciones de Euskadi, el virus que ha circulado por el territorio nos llegó de Francia.
¿Cómo se tratan cuando aparecen en personas adultas?
No hay un tratamiento eficaz porque es un proceso vírico. Si no causa complicaciones no se inicia una terapia. Es tratamiento sintomático. Si hay dolor se prescribe antiinflamatorios y si se complica, o hay que ingresar al paciente, se le pone un tratamiento antivírico intravenoso.
Aunque la vacuna no proteja, en las paperas al cien por cien, ¿los brotes serán más leves si se está inmunizado?
Efectivamente. Lo lógico es que no aparezcan, pero si lo hacen será de forma más leve. Si uno se pone en contacto con el virus- por medio de la vacuna- el sistema inmunitario se defiende mejor. El problema es que esas defensas -de memoria inmunológica que tiene el organismo- en todas las personas no llegan a nivel adecuado para defenderse al cien por cien frente a las paperas. Pero algún tipo de defensa siempre tendrá. Con las dos dosis lo normal es que la vacunación sea eficaz en un porcentaje elevadísimo, por eso se hace la segunda dosis.
Existe una corriente de opinión contraria a las vacunas. ¿El que aparezca sarampión, paperas no da 'alas' a estos colectivos?
No. Por cada cien vacunas que ponemos, pueden aparecer efectos secundarios en dos casos. Este hecho no debe servir de excusas para que la gente no vacune a sus niños y niñas. Sin las vacunas aparecerían en cien casos. Los antídotos son eficaces casi al 100% menos en las paperas, que lo son en el 90% de los casos. Hay que convencerla a la población de las virtudes que tiene el vacunar a sus hijos. Con ellas hemos hecho desaparecer enfermedades graves como la polio, el tétanos... Recuerdo haber tenido compañeros con polio que habían quedado paralíticos. No podemos volver a ese extremo. Hay que dejar muy claro que si se retrocede en las vacunaciones la población puede volver a estar en riesgo de contraer esas enfermedades.
Entonces, ¿podrían resurgir con fuerza estas infecciones víricas?
Sí. Ante cualquier duda los médicos tenemos la obligación de animar a la gente a que se vacune y también lo haga a los niños, que les proteja de enfermedades graves como la polio, el tétanos.
A pesar de ello crecen las 'familias naturistas' que cada año rechazan las inmunizaciones.
Sí. En Gipuzkoa, todos los años se incorporan un porcentaje de familias que, siguiendo esa filosofía, rehusan las vacunas lo que paulatinamente está provocando un descenso en la cobertura vacunal y abriendo la puerta al contagio. En Euskadi llevábamos mucho tiempo sin tener un brote de sarampión, pero en esta ocasión quienes no se han vacunado han llegado a conformar una bolsa susceptible lo suficientemente grande como para que aparezca de nuevo el brote.
¿Empieza a calar la idea de que no es preciso vacunar a la población?
Los pediatras solemos decir que la gente que no se vacuna es porque no ve el peligro. Y no es consciente de él porque, gracias a que hemos estado vacunando durante muchos años, se han conseguido erradicar estas enfermedades; han ido desapareciendo de nuestro entorno. Y sí, sí se ha instalado esa falsa percepción de que son innecesarias.
¿Las vacunas son las medidas preventivas más eficaces contra las enfermedades víricas e infecciosas?
Exactamente. Los resultados de salud que se consiguen con las vacunas no se logran con ningún otro medicamento que utilizamos los médicos. Es la actividad de salud que más ha conseguido para erradicar las enfermedades en el mundo. Hay que recordar que todavía no hace tanto había viruela y, ahora, prácticamente ha desaparecido.
¿La vuelta de las infecciones víricas es un aviso para que no bajemos la guardia?
Sí. Pero insisto que el problema son los grupos que no se vacunan. Porque si llega un virus se extiende en estos colectivos y son ellos los que pueden contagiar a los bebés aún sin vacunar.
PEDRO GORROTXATEGI PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN DE PEDIATRAS VASCOS
